El Polestar 4 tiene un nuevo retrovisor interior digital. Te lo contamos todo.

Hace más de un siglo desde que Ray Harroun creó el retrovisor interior. En la carrera inaugural de las 500 Millas de Indianápolis en 1911, el diseño poco convencional de Ray le permitió ver lo que ocurría en la pista sin necesidad de un mecánico de a bordo (la norma en aquella época). Poder correr sin el peso adicional de un pasajero ayudó a Ray a ganar la carrera. En aquella época, el histórico monoplaza Marmon "Wasp" amarillo fue un triunfo del diseño y la innovación. Pero ha llovido mucho desde entonces.  

Cuando presentamos el Polestar 4 en el Salón Internacional del Automóvil de Shanghái 2023, una de sus características generó bastante revuelo. Un diseño innovador con una cámara trasera y una pantalla HD supuso uno de los cambios más significativos en materia de diseño de los últimos años: la luna trasera había desaparecido. Sin avisar. Por arte de magia. Aún la están buscando.

Esta novedad fue todo un éxito, cautivó a los principales medios de comunicación del mundo y ocupó miles de columnas. ("Polestar desecha la luna trasera en su nuevo combo crossover", "El Polestar 4 sustituye la luna trasera por una pantalla de alta definición", y "Por qué los coches eléctricos del futuro no tendrán luna trasera").

Pero nuestro objetivo no era copar los titulares. 

Alterna entre la pantalla digital en HD y el espejo tradicional

Esta característica, que se presentó en el Polestar Precept, salió al mercado antes de lo previsto gracias a los avances tecnológicos. Una cámara de 2,5 megapíxeles con un impresionante campo de visión de 121 grados proporciona información en tiempo real a la pantalla HD de 8,9″ del habitáculo. Hasta aquí, todo bien. Pero ¿y si quieres ver lo que ocurre en la parte trasera del vehículo? Sin problemas, porque puedes convertir la pantalla HD en un retrovisor tradicional, algo especialmente útil cuando se revolucionan un poco tus peques. 

"No lo hicimos por hacer. Fue una decisión muy meditada. En primer lugar, mejoramos la visibilidad de la persona al volante. La cámara trasera ofrece una imagen mucho más clara de lo que ocurre detrás del vehículo incluso en condiciones poco favorables, como con poca iluminación o lluvia. La claridad es excepcional. En segundo lugar, el hecho de no tener luna trasera deja más espacio a quienes van detrás. Ahora, viajar atrás es como ir en business pero con el espacio de una suite", cuenta Ola Aldensjö, director de Producto del Polestar 4.

La base de este salto tecnológico es una combinación de seguridad mejorada y mayor confort; la información en tiempo real de una cámara externa amplía el campo de visión de la persona al volante, y la experiencia atrás se vuelve más envolvente y lujosa. No se trata de innovar por innovar, sino de utilizar la tecnología para lograr un cambio significativo. Y en ese sentido, esta ruptura con el pasado recuerda en cierto modo a los coches de carreras de principios del siglo XX.

Va por ti, Ray. Dejas tu legado en buenas manos.